El aceite esencial de citronela se obtiene de la destilación de Cymbopogon nardus, planta medicinal natural de Ceilán y que pertenece a la familia de las poáceases.
El color de su esencia suele ser pardo amarillento y con un potente aroma a limón.
Propiedades:
Es un remedio natural para llevar en nuestro botiquín de viaje pues evita y calma la picadura de muchos insectos, sobre todo los mosquitos.
Dos de sus componentes son el citroneol y el geraneol cuya virtud es ser antiséptico. Por ello añadiendo unas gotas de citronella en el agua del humidificador ayuda a purificar y desinfectar el ambiente cuando alguien de la casa tiene alguna infección respiratoria evitando que se propague.
Es eficaz contra jaquecas y migrañas.
Tónico general de organismo, equilibrando el corazón y el sistema nervioso.
Combate dolores y molestias de carácter reumático.
Sus virtudes desodorantes y estimulantes permiten refrescar unos pies sudorosos y cansados.
La citronela combina bien con los aceites esenciales de geranio, eucalipto, lavanda, albahaca y menta.
Precauciones:
No utilizar aceites esenciales puros directamente sobre la piel siempre muy bien diluídos en un aceite vegetal y realizar siempre una prueba por si existiera sensibilización
No utilizar nunca durante el embarazo.
No debe emplearse en niños pequeños ni en ancianos.
Sólo uso externo, nunca por via interna.
Los aceites esenciales cítricos son fotosensibles, no utilizarlos antes de exponer la piel al sol.