El Árnica constituye uno de los remedios más eficaces para tratar por vía externa dolores reumáticos, esguinces, golpes, chichones, moratones... en general cualquier dolor e inflamación que aparezca en la piel, siempre que no se trate de heridas abiertas.
Antiinflamatoria, analgésica, vulneraria y rubefaciente.
Precauciones: No administrar por vía interna, tóxica
Preparaciones externas, como tinturas, aceites de masaje y para mezclar su agua con arcilla roja en preparación de cataplasmas.