La glicerina o glicerol, se extrae de varios aceites y grasas vegetales mediante hidrólisis.
El glicerol fue descubierto en 1779 por el farmacéutico y químico sueco Scheele. Su viscosidad y sabor dulce característicos, sirvieron para bautizar esta substancia. Glicerina proviene de la palabra griega glykys (dulce) y la palabra cera.
Propiedades características:
La glicerina vegetal es un ingrediente natural autoconservante que atrae y retiene la humedad.
Es incolora e inodora.
Con una densidad relativa alta (alrededor de 1,25) tiene un punto de ebullición de 290 °C y un punto de fusión de 18 °C.
La glicerina líquida es resistente a la congelación, pero puede cristalizar a baja temperatura.
Es soluble en agua en cualquier proporción, y se disuelve en alcohol, pero es insoluble en éter y muchos otros disolventes orgánicos.
Usos y aplicaciones:
Gracias a sus fuertes propiedades higroscópicas (capacidad de absorber humedad del medio circundante), posee un efecto hidratante.
Además, estabiliza la función de barrera mejorando su elasticidad.
La podemos utilizar en cualquier producto de base acuosa, champú, gel, agua micelar, tónicos y en la fase acuosa de cualquier emulsión.
Se utiliza con frecuencia en productos para el cuidado de la piel, como cremas y lociones para las manos, además de en la elaboración de jabones DIY.